domingo, 7 de abril de 2013

Cómo caer en las trampas de turista en Bangkok (y no morir en el proceso)


Después de ir al mercado de fin de semana de Bangkok, morir derretida y volver al centro de la ciudad caí de lleno en el típico “timo” que hacen para “enganchar” a turistas. Estando yo informada, habiendo leído sobre ello y siendo consciente… ¡Si es que parezco tonta, pero estaba tan vulnerable! Si no los conocéis os dejo con este link que os los cuenta… pero vamos, que si el templo está cerrado y que se si me hacen un tour por la ciudad por 20 Bats en Tuk Tuk (menos de 1 euro) pasando por ciertos sitios para que puedan estampar la cartilla de subvención del gobierno. Lo curioso es que no me lo dijo el conductor del Tuk Tuk, me lo comentó un hombre muy amable que me vio perdida por la calle con un mapa. Este hombrecillo paró a un Tuk Tuk cualquiera de la calle (tenía que tener bandera de Tailandia) y se presentó muy amable diciendo que si a todo el recorrido. No incluía el Gran Palacio, pero bueno, lo quería hacer mañana de primera hora y no con la caló que estaba cayendo.

Actualización: acabo de encontrar este post que comenta el mismo tour que me hicieron a mi esta mañana. 

¿Cómo fue el recorrido?

Primero me llevó a visitar el Budha gigante, de 32 metros en concreto. Muy interesante ver como los Tais rezaban, dejaban en los pies flores y velas, y le rociaban una especie de líquido que vendían en botellas como ofrenda. Me queda pendiente averiguar que es.

Después empezó lo sospechoso, aun que yo en el fondo sabía que vendría desde el momento que me monté en el Tuk Tuk… parada en una agencia de viajes. Entro, le cuento mis planes al agente turístico, me intenta vender un paquete. No compro. Fin de la historia.

Siguiente parada el “Lucky Budha” que en realidad no tiene gran interés, pero bueno… otra cosa que ví.

Y después otra parada cansina, “Thai factory”, que intentaban venderme un vestido a medida. De nuevo con una estupenda sonrisa explico que no tengo dinero y que tengo una mochila pequeña (todo cierto) y que no puedo comprar nada.

Y seguimos… ahora parada en el Monte Dorado, que según comenta Pol de mundonomada en su guía de Bangkok es "Un pequeño monte con un templo y una estupa, como una cruz en la religión cristiana, gigante arriba. Ofrece vistas estupendas de la parte antigua de la ciudad, aunque también se puede apreciar la zona de negocios (rascacielos). Mejor ir temprano o tarde ya que debes subir 300 escalones y si el sol aprieta puede ser duro. Pues yo a las 14:00 empecé a subir las escaleras y corroboro que el sol aprieta... menos mal que no tengo con quien quejarme.





































¿Lo bueno? Que iba con tiempo, no me importó la ruta turística, visite varios Wat, es decir templos,  y encima no pague nada. ¿Por qué? No encontré al conductor después de bajar las 300 escaleras del Monte Dorado y pues continué mi trayectoria. ¿Lo malo? Vueltas por la ciudad que si vas con prisas no te compensan y tener que decir que no vas a comprar nada de los sitios que visitas. Y por supuesto: el sentimiento de sentirte tangado.

Tras la visita del Monte hago una parada merecida y como algo. Buenísimo.
























Sigo con mi rollo y me pongo a andar, sacando lo mejor de mi para entender el mapa de Bangkok. Llego hasta el columpio gigante, con el ayuntamiento al fondo y visito Wat Suthat, donde disfruto mucho sentada un rato simplemente pensando…

Sigo a pie y camino hasta el Gran Palacio, que cierra a las 15:30 (según los carteles de la entrada), y ando hasta el canal para coger un barco para adentrarme en Thonburi, la zona de Bangkok que queda al otro lado del río, y que normalmente no se visita. ¿Qué hay? Mucha pobreza, más templos, colegios de color lila y casas (tipo Venecia) inclinadas. 2 horas 1000 Bats regateando. Casi me quedo dormida por el camino, estaba atardeciendo y empezaba a sentirme más a gusto con la ciudad. Visitamos Wat Arun con el atardecer, y pese a estar cerrado, merece la pena por verlo de noche. 





































Retomo  mi actividad de turista y me dirijo al China Town (calle Yaowarat). Impresionante tráfico y muchos chinos (de ahí el nombre del barrio supongo), comida  por toda la calle y visita a un supermercado (que me gusta). 
Y ahora os dejo que un grupo de brasileños están cantando “nossa nossa… ai” con la guitarra y no es plan de seguir con el portátil.

¡Besazos!

5 comentarios:

  1. Jooooo! No veas la envidia que me das corazón, yo aquí haciendo tumbing como un Domingo cualquiera, solo tu marcas esa diferencia

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  2. Jooooo! No veas la envidia que me das corazón, yo aquí haciendo tumbing como un Domingo cualquiera, solo tu marcas esa diferencia

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  3. Bueeeno, un euro de timo se puede soportar todavía a estas alturas de viaje =). ¡Guarda bien las fotos!

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  4. Tu camiseta molona para el primer día, si es que esta chica... por cierto, siguiendo con los consejos del decálogo, se nos olvidó poner: cómprate un gorrito molón si no quieres que se te cueza el seso.
    Los timos son parte de la aventura, ¿qué tendrías sino que contar a los otros backpackers cuando llegues al albergue' :)
    Tengo mono de comida Thai viendo tus fotos.
    Besitos,

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  5. Leerte mientras me tomo uno de los coulant que dejaste en mi congelador no tiene precio!!! Madre mía Maripi, lo del autobús de Ro, nada al lado de tu moto entre camiones!
    Un beso enorme, te seguimos de cerca
    Marta

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